Hoy voy a hablar de algo que parece haber causado más polarización en Guadalajara, mi ciudad, que la que ha causado Donald Trump en Estados Unidos, o el #Brexit en Reino Unido. Voy a hablar de nuestra nueva «marca-ciudad» que ha dividido la opinión pública en las redes sociales. Lo único cierto es que esa imagen no te puede dejar indiferente.
Para eso, primero debemos de entender qué es una marca. Una marca tiene como fin posicionar un producto, servicio, empresa, asociación, entre otros, en la mente de los consumidores. Gracias a la marca, nosotros le damos en nuestra mente «una forma» a eso que se quiere representar. No es lo mismo una serie de productos para jabón genéricos que un jabón Zest. Cuando vas a un centro comercial y ves un jabón Zest, no sólo se te viene a la mente que se trata de un jabón, sino que éste tiene ciertos atributos que lo diferencian de lo demás (producto tanto de la estrategia de branding como de tu experiencia anterior con el producto), lo que incide en tu decisión de compra.
Algo así es lo que se quiere hacer con Guadalajara, darle su propia marca. Muchas ciudades o entidades del mundo como nuestro país, la Ciudad de México o el Estado de Jalisco, ya tienen una. Esa marca debe de tener un elemento de diferenciación, por lo cual deberíamos de preguntarnos ¿qué es lo que hace a Guadalajara diferente a las demás?
Algunos hablan de su comercio o su industria, pero no es la única ciudad que destaca por ello; podemos hablar de la FIL, pero no sé si sea prudente poner un libro como imagotipo cuando a pesar de la importancia del evento, la gente en nuestra ciudad no lee mucho. Con lo que un extranjero se siente identificado cuando viene a la ciudad es con el mariachi y el tequila.
De ahí, la decisión atinada en mi punto de vista de elegir la «Guadalajara, Guadalajara» de Pepe Guizar por lo que representa. Cantada por Plácido Domingo, por Elvis Presley, interpretado por Paco de Lucía y otros músicos de renombre internacional, es una canción que nos da identidad.
Muchas personas comentan que Guadalajara es más que mariachi y tequila, que es más grande que eso, que debemos de ver al futuro y no al pasado. Pero estamos olvidando cómo es que las tradiciones y raíces le dan identidad y cohesión a una comunidad. De hecho, si Guadalajara se volviera una ciudad desarrollada, producto de un hipotético boom económico o del desarrollo de la ciudad como un hub tecnológico, estos elementos le seguirían dando mucha identidad; el mariachi y el tequila seguirían siendo importantes. La tradición no tiene que estar peleada con lo moderno.
París es más que su Torre Eiffel, y ésta es el imagotipo de su «marca-ciudad», Hong Kong no sólo son dragones sino desarrollo y libre mercado, y su imagotipo es un dragón.
En un mundo actual donde muchas nuevas ciudades crecen de la nada y buscan desesperadamente ese algo que los identifique, nosotros renegamos de nuestra cultura como si fuera expresión de un país subdesarrollado, mientras que quienes visitan nuestra ciudad la admiran. Por el contrario, tener todas estas raíces y tradiciones nos da una ventaja sobre otras comunidades (que no lo sepamos aprovechar es otra cosa).
Entiendo que cuando se trata de un nuevo logotipo o imagen la polémica nunca dejará de existir. Ya se trate del nuego logotipo de Londres 2012, el de Google, Microsoft o Instagram. Tampoco gustó al principio la nueva interfase que creó Jonathan Ive para el iOS y ahora todos parecen contentos con ella. El arte del diseño es algo demasiado subjetivo como para esperar un consenso. Que si se puede emular en 2 minutos con Photoshop, que si pagaron una millonada para algo que no gustó a muchos (el caso de los JJOO de Londres), que si no costó un centavo (el caso de Guadalajara), que si es demasiado moderno, que si es demasiado antiguo, que si los millennials no se identifican, que si la gente mayor tampoco.
Cierto, yo veo el logotipo, lo observo detenidamente, y le veo algunos peros. Creo que puede mejorarse, creo que al trabajo de diseño, como se puede ver en la Fan Page, le hace falta algo de cohesión; y creo que no lograron muy bien simular los nombres de las tiendas típicas de la Guadalajara de ayer. Así también, se me hace criticable que usaran una fuente gratuita en lugar de crear una propia como parte del trabajo creativo. Pero en lo particular la idea me gusta y mucho, el concepto me llamó más la atención que esos otros detalles, me gustó ver como las palabras cantan esa canción tradicional. Creo que la noticia debería de ser que Guadalajara ya tiene su «marca-ciudad», los detalles de diseño a mi parecer pasan a segundo plano, porque son cosas que pueden pulirse. La idea es muy buena.
Que hubiera sido mejor convocar un concurso entre agencias en vez de que trabajaran las que generalmente le trabajan al gobierno y al alcalde Enrique Alfaro, sí, estoy de acuerdo. También es cierto que aún con concurso de por medio, muchos hubiesen quedado insatisfechos con el resultado; siempre pasa, y más cuando nosotros los tapatíos somos lo suficientemente caprichosos para que los departamentos de mercadotecnia de las empresas prueben la aceptación de un producto en esta ciudad para luego lanzarlo en todo el país.
Tampoco creo que se trate de una «agencia de pacotilla», máxime cuando estas mismas agencias convirtieron a un personaje con una personalidad antipática como lo es Enrique Alfaro en un candidato que se puede vender y que logra generar simpatías en ciertos sectores de la población (sin olvidar esa vergonzosa excepción cuando expusieron la lista nominal del INE al subirla de forma irresponsable a la nube).
Otras personas hablaron de plagio, que se «habían robado» el logotipo de otra propuesta. Por ejemplo, venían a colación estos dos diseños:
La primera es la marca del Ars Santa Mónica, un centro cultural de Barcelona; la segunda es un festival. El estilo tiene parecido con la marca Guadalajara en que el tamaño de las letras va aumentando o disminuyendo de tamaño. Pero basta observar un poco para darse cuenta que la ejecución es diferente. Además tendríamos que preguntarnos si también los diseñadores del centro cultural «plagiaron» al festival, ¿o cómo?
Subo también la imagen de este libro de Alvin Toffler:
Este libro lo compré hace 8 años, muy bueno por cierto. Usa el mismo efecto de «agrandamiento de las letras». Sin ser diseñador, puedo darme cuenta que este es un recurso que no es utilizado pocas veces en el diseño gráfico. De ninguna forma podría afirmar que la ciudad de Santa Mónica ni el festival de periodismo le plagiaron a este futurólogo.
Luego viene un video que lanzaron para socializar la marca. Algunos encuentran similitudes con el trabajo que estas empresas (las mismas) hacían para Movimiento Ciudadano. Esto es obvio cuando los creativos que hicieron tanto este video como los trabajos para Enrique Alfaro son los mismos. Pero yo no percibo ni en el video, ni en el logo, intención alguna de asociar a MC o a Enrique Alfaro con la marca, ni alguna indirecta. E insisto, sí me hubiera gustado más un concurso entre agencias, pero aún así creo que la idea que se creó es muy buena. Si hubiera existido intención proselitista alguna, la oposición o el Gobernador Aristóteles del PRI se hubieran indignado por hacer «proselitismo disfrazado» (en menos de 2 años hay elecciones), pero no fue así. Ni siquiera El Respetable, un diario que no hace honor a su nombre y que funciona como estrategia de golpeteo para cierto partido político, se atrevió a decir que era propaganda a favor de alguien.
De hecho, es una buena noticia dentro de un país acostumbrado a los gobiernos paternalistas y verticales que imprimen su marca en cualquier cosa que toquen para que recuerdes que les debes de estar agradecidos porque trabajan para ti.
Como se puede ver en la foto, todos los alcaldes tanto de MC, como del PRI así como el Gobernador emanado del PRI estuvieron en el evento presentando la marca-ciudad. Vaya, ni siquiera se observa el consenso en un país donde éstos generalmente sólo sirven para servir a sus intereses, y cuando se trata de pensar en la ciudadanía, las discrepancias afloran.
Retomando el video, al verlo me queda claro que con este logotipo no sólo se insiste en hablar de las raíces, sino hablar del presente, de lo que somos, y lo que queremos llegar a ser.
El video es muy bueno porque lograron modernizar con guitarras de rock, baterías e intérpretes de Jalisco, una canción como es Guadalajara, Guadalajara, sin destruirla; porque vaya, es una canción muy difícil de no destruir. Lograron encontrar un gran balance entre lo tradicional y lo moderno. Sí, me hubiera gustado que también estuvieran otros intérpretes (y claro que no estoy pensando en Maná), pero la elección en general no estuvo mala. A mí se me puso la piel chinita, a muchos conocidos también.
El video, como creyeron algunos, no tuvo la intención de «presentarle Guadalajara a los extranjeros», sino de socializar la marca en la ciudad. Y creo que sí lo lograron. Guste o no guste, ya todos la conocen.
Para finalizar, sí, comparto la opinión de que el trabajo final es mejorable, se pueden hacer algunas adecuaciones, pero el concepto me parece muy bueno y creativo. Espero que con el tiempo, esta «marca-ciudad» vaya evolucionando y su existencia no se limite a un simple diseño.
Hay que celebrar que Guadalajara ya tiene una «marca-ciudad», una ciudad del tamaño e importancia que tiene la Perla Tapatía no se podía dar el lujo de no tenerla. Para mí esa es la gran noticia, sabiendo que la idea se puede perfeccionar. Me gustaría que ahora ante tanta indignación, agencias participaran en el mejoramiento de este concepto y que el gobierno les abriera las puertas. Para concluir, en mi particular punto de vista, a pesar de sus puntos flacos y que se pueden mejorar, me agrada el concepto creado.
Y sí, creo que va a pasar el tiempo y el logotipo (con algunos ajustes posteriores al trabajo gráfico posiblemente) comenzará a gozar de mayor aceptación, como siempre ocurre en estas cuestiones. Al tiempo…