Robar en México en 6 puntos

Feb 18, 2015

Robar en México en 6 puntos

1.- El verbo robar viene del antiguo alto alemán roubón o rauben que significa despojar. Robar es una práctica frecuente y dicho acto ha quedado patente en todo el transcurso de la historia mundial. Las religiones lo prohiben explícitamente no robarás, y tanto en las leyes escritas como en el sentido común del ser humano está determinado que robar es malo.

2.- Los mexicanos, dentro de nuestra concepción, asumimos (en la gran mayoría de los casos acertadamente) que los políticos roban. No sólo eso, roban con placer, no les importa, ni siquiera se preocupan por las críticas. Compran casas blancas, departamentos lujosos en Nueva York, Ferraris, islas, cuando su sueldo muy rara vez sobrepasa los 200 mil pesos mensuales. ¿Cómo le hacen? ¡Pues robando!

3.- Los políticos roban, pero aprendieron a robar, al igual que los ciudadanos. El vicio se adquiere poco a poco, con pequeños actos que se relativizan para que después se hagan más grandes y entonces vean estos actos como un acto normal. Que fue una mordida, una licitación tramposa de $10,000 pesos. -Ah, al cabo es poquito, no va a afectar en nada. Se van acostumbrando a las reglas del juego y creen que para sobrevivir deben de seguirlas. Mejor ser tranza pero chingón, a ser honesto pero pendejo. El que no tranza no avanza.

4.- Luego las exigencias de los ciudadanos están por debajo de lo esperado. –Entiende Cerebro, es que ve, sí, esa empresa constructora lava dinero y hacen cosas ilegales, pero con tantas obras que hacen, tantas torres, tantos puentes, generan empleos, satisfacen demanda, al final es más bueno lo que hacen-. Si el político o el empresario roba, pero «también hace cosas buenas» entonces se le perdona. -Es que mira, Andrés Miguel Peña Ebrard si roba, si se lleva su tajada, pero roba menos que otros como Vicente Martí Calderón Mancera y ha hecho muchas cosas por la ciudad, la neta yo sí votaría por él; que robe poquito no tiene nada de malo, además pues ser Gobernador es difícil, o ¿a poco tú no lo harías?.

5.- ¿Cuál es la diferencia entre un ratero que te asalta o un ciudadano-político-empresario que roba evadiendo impuestos, amañanado licitaciones y desfalcando recursos públicos? Solamente las formas. El robo del ratero es explícito porque con pistola o cuchillo en mano sabes que te está robando, los demás hacen como que no roban pero roban. También te quitan parte de lo que es tuyo, que has pagado vía impuestos para que te retribuya por medio de políticas públicas. Tal vez no te das cuenta hasta que pasa el tiempo y ves que el país está más jodido de lo que esperabas. Pero es lo mismo, es robar, es «pecado mortal».

6.- No te quejes de los que robamos, si lo hacemos es por tu culpa, porque te quejas «en lugar de proponer», en lugar de quejarte, ponte a trabajar, el cambio está en uno mismo – Atentamente: Un ratero.