Parecía que hacía falta un baldazo de agua fría. Es cierto que México había logrado un marcador histórico con la moribunda Francia, pero algunos ya empezaban a vaticinar que la selección tenía con que ganar el mundial, que ibamos a ser capaces de levantar la copa del mundo, ¡que pendejada, caray!. Pues ahora llegaron los uruguayos (y yo lo advertí, estos van a ser más difíciles que los franceses) y que nos ganan con un gol de Suárez.
No hace falta mucho narrar el partido. Javier Aguirre sigue cometiendo los mismos errores (y yo señalé que se había equivocado también en los cambios contra Francia), ¿por qué sigue metiendo al Guille Franco cuando este ya nos demostró que no sabe definir?, ¿Por qué el Cuau de inicio?, ¿Por qué salió Guardado cuando estaba jugando bien?. Volvieron a aparecer los fantasmas del pasado, las fallas atrás, la poca certeza adelante, que de lo único que podemos hablar, es de un tiro al poste del mismo Andrés Guardado. Y mientras México trataba de hacer su partido, Suárez, la estrella del Ajax de Holanda, metía el gol que pondría el marcador definitivo, y que no descalificó a México, porque el resultado en el otro partido, le terminó beneficiando.
Si bien el partido contra Francia lo catalogamos de histórico, creo que tendremos que ubicar esa victoria en la realidad, porque los franceses andaban tan mal, que hasta Sudáfrica se dió el lujo de ganarles 2-1. Creo que esto fué un baldazo de agua fría para los que aseguraban que México iba a ser historia en este torneo (y sobre todo para los ilusos que decían que México iba a ganar el mundial). Simplemente se ve que hay mucho en que trabajar si se quiere vencer al siguiente rival, el cual será Argentina en octavos de final que se jugará el Domingo.
Lo único que se ha asegurado hasta ahora es de haber hecho un mundial «no peor» a los 4 anteriores, de ahora en adelante todo lo que se haga será ganancia, y será mucha si el conjunto tricolor logra vencer a Argentina y vengarse por la pasada eliminación en Alemania 2006. Los argentinos parece que tienen todo a favor, tienen a Messi, a Higuaín, aunque Maradona en el banquillo podría ser un factor en contra para los chés, y esperemos que México le pueda sacar provecho, siempre y cuando ahora sí Javier Aguirre haga los movimientos correctos, y no se equivoque a la hora de parar al equipo, como ocurrió con Uruguay.