Amarres de amor, brujerías y más cosas estúpidas.

Sep 12, 2009

A veces llego a extrañar a los inquisidores de la edad media cuando veo estas cosas. ¿Por qué hay gente que en pleno siglo XXI sigue creyendo en la brujería y en la magia negra?, y no solo eso, sino que son víctimas de charlatanes que les sacan un buen dinero, porque creen que con sus parafernalias, van a lograr por fín que ese hombre se acerque a ella. La bruja posmoderna se encargará de amarrarlo para que ella lo tenga toda la vida. -Y no se preocupe usted Doña Ignorante, si falla y se vá con otro, le doy esta poción de garantía, mezclela con azucar negra y una pata de conejo y el hombre será infeliz de por vida por no haberle hecho caso.

¡Que estupideces!. Por favor, siglos de avances científicos y la gente sigue creyendo en estas tonterías. Y lo peor de todo es que no todos son gente sin educación. Hay gente con carrera universitaria que sigue creyendo en ritos que ya se habían desmitificado al inicio de la Revolución Industrial. ¿Donde queda la razón, la ciencia?, ¿por qué la gente sigue empecinada en creer en la magia, las energías cósmicas de Walter Mercado, la piedra de la suerte que venden en los infomerciales de Televisa?.

Ustedes probablemente verán en uno de los anuncios de este blog, un anuncio de amarres de amor. Esto porque el Google Adsense analiza las palabras clave de los textos de los sitios donde se encuentran, ¡esa bruja no va a lograr amarrar a tu amor, pero yo si logré amarrar su maldito anuncio, jaja!. Entren y verán todas las charlatanerías incrustadas en una página web con un pésimo diseño. ¿Acaso no puede amarrar a un buen diseñador que le haga una página decente?.

Este tipo de charlatanerías dá verguenza; si creíamos que teníamos suficiente con estafas con empresas multinivel como de Equinoccio Internacional, pues ahora vemos que este tipo de gente se logra desembolsar una grán cantidad de lana con promesas baratas, más baratas y fáciles, pero que a la larga lo único que se gana es más ignorancia.

Al menos los que limpian las malas vibras en el zócalo se respetan porque más que como algo efectivo, es visto como algo tradicional, y mucha gente se las hace por eso mismo. Pero en el caso de este tipo de charlatanes, de tradicional no tiene nada. Ojalá la razón algún día los haga desaparecer del mapa.