Ciudadano en 20 malditos puntos

Ago 19, 2014

Maldita sea. Pobre de mí, yo tan víctima. Yo tan bonachón que soy, nunca le hago nada a nadie. Porque yo sé que como en las películas de Hollywood, los buenos les vamos a ganar a los malos. Sólo es cuestión de sentarse y esperar…

Ciudadano en 20 malditos puntos

1.- La palabra «ciudadano» está de moda.

2.- Incluso un partido político se llama «Movimiento Ciudadano».

3.- Si uno escucha atentamente algún discurso de un político, escuchará repetidamente la palabra «ciudadano» o «ciudadanía».

4.- Nuestros gobernantes dicen gobernar para los ciudadanos, de hecho es su obligación, las estructuras políticas, dicen, fueron diseñadas para ello.

5.- Pero no es cierto.

6.- Los políticos necesitan de los ciudadanos para llegar al poder, pero se sirven de ellos para mantenerse y obtener todos sus beneficios cuando ellos deberían de servir a los ciudadanos.

7.- Se pueden contar millones de ciudadanos en México. A los 120 millones de habitantes, sólo hay que restarle a quienes no han cumplido la mayoría de edad.

8.- Pero si somos estrictos con el término «ciudadano» entonces hay más bien pocos, son una minoría. No sé si privilegiada porque no se requieren palancas ni estar en una posición social acomodada, simplemente falta voluntad.

9.- Los verdaderos ciudadanos son los que podrían forzar a los políticos a rendir cuentas, a trabajar.

10.- Pero son pocos, lo suficientemente pocos para que los políticos tengan obstáculos que les impidan absorber al pueblo que los gobiernan, donde sólo buscan la mejoría de los gobernados si ésta va de la mano con la satisfacción de sus intereses.

11.- En resumen, a la mayoría de los políticos no les importan los ciudadanos. Solamente para llegar a sus puestos. A la mayoría de los que dicen llamarse ciudadanos, tampoco les importan muchos sus políticos y no conocen los mecanismos (muy rudimentarios) para hacerlos rendir cuentas.

12.- Entonces la palabra ciudadano es un adorno.

13.- La nueva generación (ni en la política ni en la ciudadanía) parece no estar a la altura de las circunstancias. Personas apáticas, jóvenes políticos que su único ideal es el derroche.

14.- ¿Qué tendría que pasar para que esto mejore?

15.- ¿Qué nos echemos cubetazos de hielo y agua fría en la cabeza y enrolemos a más gente para convencerla de que se conviertan en buenos ciudadanos?

16.- Tal vez lo que escribo está de más. La gente no se quiere preocupar con cosas complicadas, con asuntos políticos, con temas de sociedad, aunque todas estas cosas complicadas les afectan en su vida diaria aunque las evadan y hagan caso omiso de ello.

17.- El ciudadano tiene más herramientas en la actualidad para ser ciudadano, pero no muchos las aprovechan. Muchos dicen sumarse, muchos creen medir su ciudadanía en función a los likes que les dan a las «causas» en Facebook.

18.- Y mientras todo esto pasa, nuestro país se va abajo. Crece la desesperanza y el hastío.

19.- Y la gente se pregunta por qué pasa esto, se indigna, se molesta, se encabrona, se emputa.

20.- Como igual se emputan cuando les dices que deberían ser buenos ciudadanos y no lo son.