Normcore o el afán de etiquetar todo, absolutamente todo

Abr 28, 2014

Las modas y las tendencias son inherentes al ser humano. El biólogo Richard Dawkins hablaba de ellas como un ejemplo de lo que él bautizó como «meme» (de ahí el término que se utiliza tanto en Internet), que es una idea que se comporta tal como si fuera un gen, la cual por más fuerte es, más rápido se propaga y dura más tiempo. Pero me queda claro que hay de modas a modas, y de tendencias a tendencias. Y esta nueva «modita» que en los próximos días, meses, años, escucharás hasta el hastío, esta nueva tendencia del «Normcore» es una muestra de como a los seres humanos nos gusta etiquetarlo todo.

Normcore o el afán de etiquetar todo, absolutamente todo

¿Qué es «Normcore? Pues ser común y corriente. Imagínate que te levantas de la cama, te bañas, es sábado, te pones la primer vestimenta que encuentres, fodonga, sin «gusto alguno» y sales al Oxxo por un café Andatti (¡Guac!). Ya eres un «Normcore». Así de absurdo. Las revistas de moda ponen a Jerry Seinfield como el claro ejemplo a seguir para ser un «Normcore». ¿Dónde está el ingenio?

Al menos dentro de la moda «hipster» se podía alegar que esta tribu tenía algunos rasgos positivos como la lectura, cierto interés en la cultura y algunos temas que de alguna manera eran parte de una contracultura que hacía frente a los defectos de los influjos de la inercia mundial. Pero al convertirse en moda, lo «hipster» de alguna manera se contradijo, el principal argumento es aquel que se usó para hacer mofa de ellos. El hipster odia el mainstream, pero se había convertido en mainstream. Trataban de ser «diferentes a…» pero terminaban siendo «iguales a…».

Con los normcore ni siquiera se trata de una moda, se trata de un modo de consumo que siempre ha existido. Más bien podría tratarse de meter a esta tendencia al mundo de consumo, hacer «cool» a los que no tienen el más mínimo interés en ser «cool». De esta forma, las empresas especializadas en ropa podrán aprovechar esta tendencia y vender.

«¿Tiene exceso de ropa en su tienda? ¿Tiene mucha ropa que ya no usa? Le doy una noticia. Usted está a punto de volverse totalmente rico. Sí, venda esos pants guangos a $1,000 dólares, esa camisa sin chiste a $700 dólares.

Posiblemente marcas de prestigio empezarán a invertir en esta moda. Tal vez no bajo el nombre de su marca principal, pero crearán tal vez marcas alternativas con un aspecto desenfadado, pero eso sí, muy caro. ¡Que se vea que esta camisa con hoyos es Aeropostale! ¿Es tu camisa de siempre que usas desde que ibamos en la prepa? -¡No, lo compré en el Fashion Mall de San Francisco en U$600! Viene con todo, hoyos y aroma a humedad.

Una amiga alguna vez me expresó su molestia porque cuando emergió la cultura hipster, se sintió expuesta. Ella tenía una forma de comportarse parecida debido a que así era su personalidad y eso la hacía sentirse única, sentimiento que perdió a la hora de que lo «hipster» se volviera de moda. ¿Ahora la gente no podrá pasar desapercibida con su vestimenta completamente desenfadada? De pronto el mundo de la moda tiende a ser absurdo, y cuando falla la creatividad, sólo se trata de tomar algo que ya existe (o existió) y ponerlo dentro del mundo de la moda.

Estos son los normcore, gente desenfadada, que quiere pasar desapercibida. Pero que paradójicamente estará a la moda.