«Desarrollo» vs Arbolado

Ene 31, 2013

El hombre ha hecho históricamente varias atrocidades en nombre del «desarrollo», de la necesidad de progreso. Como especie buscamos prosperar, pero no todos los cambios son buenos, y cuando no lo son, se venden como buenos porque ¡es progreso!, ¡si te opones eres un retrógrada!. Luego pasa el tiempo, miramos atrás y nos damos cuenta que habían cosas que debían haber sido conservadas.

"Desarrollo" vs Arbolado

Esta fotografía es de la Av. López Mateos Norte en la ciudad de Guadalajara. La primera data de 1983 y fue tomada por un camarógrafo desde una torre que se encuentra en esta avenida. La segunda no tiene un año de haber sido tomada, y la obtuve de Google Maps (nótese los renders de los edificios colocados por aficionados, luego no vayan a pensar que se ha lanzado un Grand Theft versión Guadalajara). ¿Ves alguna diferencia? Sí, hay una muy clara. En la de la izquierda la avenida está llena de árboles, en la de la derecha no hay prácticamente nada.

Yo recuerdo esa avenida en la década de los noventas, mucha más parecida a la de la primera fotografía. Esta avenida tenía un bello arbolado, con el tiempo, sí, empezaron a haber congestionamientos de tráfico y las autoridades (del PAN) decidieron ampliar el túnel vehicular por lo cual tuvieron que derribar todo ese bello arbolado. ¿Se solucionó el problema del tráfico? Por supuesto que no, pero le pusieron en la torre al arbolado urbano que embellecía esta avenida. La López Mateos (que en algún punto de la ciudad conecta con la Minerva) perdió su encanto y termino siendo una avenida del montón. El ecosistema cambió dramáticamente, de ser una avenida boscosa y acogedora, ahora se percibe una avenida más bien árida.

Las áreas verdes no son prioritarias para las autoridades, esto en Guadalajara y en muchos lugares de México. En la Zona Metropolitana de Guadalajara se han construido muy pocos parques en tiempos recientes, quienes ya rebasamos la mayoría de edad constatamos que los parques que vemos son prácticamente los mismos, en los nuevos desarrollos prácticamente no existen, y si existen, son pequeños, están dentro de los cotos y han sido desarrollados por la iniciativa privada mas no por el estado. En cambio la tala de árboles es la constante en nuestra ciudad. A un terreno se le da un valor de uso basado en el dinero, en cuanto se puede vender, en lo que se puede desarrollar ahí, pero no se piensa en como este terreno podría abonar a la sociedad, un terreno que podría convertirse en áreas verdes que podrían servir como área de esparcimiento que en cierto punto coadyuvaría a mejorar el tejido social, dado que los niños y jóvenes tendrán espacios para su recreación.

Lo mismo con las avenidas, se buscan «soluciones» a los problemas de tráfico, soluciones que ya no tienen cabida en otros países por su poca eficacia (véase como en Seúl, Corea del Sur, han demolido vías rápidas para construir parques urbanos). Buscan agilizar el tráfico (en muchos casos sin éxito) sacrificando la imagen visual de las avenidas, porque también es cierto, los árboles pueden tapar anuncios espectaculares.

Debido a que se ha tomado mayor conciencia por parte de la ciudadanía en este tema, algunos desarrollos buscan que el impacto sobre el ecosistema sea menor. Un caso es el desarrollo llamado Central Park, en frente de Avenida México, que consistirá en varias torres residenciales y corporativas de más de 100 metros, en un terreno privado completamente arbolado. En lugar de acabar con el arbolado, se decidió solo talar en el área donde se van a levantar los edificios y dejar el resto de dicho arbolado intacto, por lo cual se conservará entre el 70% y 80% de este (a ojo de buen cubero). Qué mejor que este terreno  se hubiera convertido en un parque, tendría todo el potencial para serlo. Lamentablemente este terreno completamente arbolado siempre fue privado, por lo cual es difícil convertirlo en algo así.

Sin embargo falta mucho trecho para lograr tener una sociedad que sepa desarrollarse procurando respetar y promover las áreas verdes. La naturaleza no tiene que estar peleada con el desarrollo, por lo contrario, es parte de este. Porque una ciudad no se puede desarrollar si no logra conservar sus virtudes.