Ebrard 2018

Sep 14, 2012

México necesita de una izquierda moderna, progresista, representada por un estadista. Marcelo Ebrard con sus defectos y sus virtudes creo que es el más capaz para comandarla. En un momento donde varios sectores políticos están en crisis, ha llegado el momento de darle oportunidad a esta izquierda.

Ebrard 2018

Fue algo extraño, hasta hace algunos años (principios del año 2000) no me gustaba mucho viajar al DF, no me gustaba estar en la ciudad. Pero hubo un momento en que esto empezó a cambiar, que comenzó a ser una ciudad más agradable con todo y los problemas de tráfico. La seguridad fue el tema que más me impresionó. En estos últimos años viajé constantemente a la capital, algo así como una vez al año. De pronto empecé a notar que la gente se notaba más tranquila, relajada (antes la sentía muy a la defensiva), me sentía más seguro en las calles de la ciudad. Y quise averiguar si era me imaginación así que le pregunté a un taxista que me llevó del Foro Sol al hostal donde me había hospedado. Este me comentó que la ciudad era mucho más segura que antes, que el gobierno del DF había tenido mucho que ver, pero también la participación ciudadana y el involucramiento de la gente había ayudado a bajar los niveles de seguridad. Pensé que igual el taxista hablaba muy bien del gobierno, por naturales razones.

Después le pregunté a unos amigos capitalinos y me comentaron que la seguridad había mejorado. Luego, en Internet encontré que Marcelo Ebrard había sido muy reconocido por este tema, hasta el punto en que el puesto que le dieron en la ONU, se lo dieron precisamente por su destacable mejoramiento de la seguridad en la capital. Claro que no es un oasis, todavía tiene problemas, y con esto no quiero invitar a la gente a ir a caminar a la Buenos Aires por la noche. Pero es notorio porque antes el DF era la capital más insegura del país, y ahora entre que se ha vuelto más segura y otras se han vuelto más inseguras por el tema del narco, la capital ya ni siquiera figura en las listas.

Ebrard es un claro ejemplo de estadista. Claro, no comparto todas sus ideas, sobre todo las relacionadas con el aborto. Cierto que durante su gestión no todo fue perfecto, como las supervías que implicaron un atentado contra la naturaleza y que generó el repudio de los vecinos. Pero al final del día su trabajo en el Distrito Federal fue lo suficientemente destacable para haber sido nombrado el mejor alcalde del mundo. Si algo me ha llamado la atención de Marcelo Ebrard, es el fuerte involucramiento que tiene con todas las políticas públicas realizadas en el DF. Mientras en el Estado de México (esto lo vi en Atizapán), cuando tapan un bache, colocan como 20 lonas publicitarias con el slogan de «Compromiso en el Estado de México» y «Peña Nieto te cumple» al más puro estilo viejo PRI. En el DF Marcelo Ebrard explica con lujo de detalle, como se realizará cierta política pública, desde un programa social, una obra vial.  Marcelo Ebrard a veces parece incluso involucrarse en temas que otros políticos delegarían.

Muchos critican a Marcelo Ebrard de ser snob (por ser de clase media-alta) y decirse de izquierda. A menos que se trate de un comunista radical, no veo el problema. Ni siquiera en que un empresario, o una persona bien acomodada pueda ser de izquierda, porque tiene que ver más con una convicción que con una posición económica o social, porque vaya, entonces todos los que se dicen de izquierda tendrían que vivir en las cavernas. Otros claro, dicen que no es de izquierda porque estar dentro de una izquierda moderada para ellos es ser de derecha.

Creo yo, Marcelo Ebrard es alguien con mayor preparación política que la mayoría de esos que dicen gobernarnos. Es un hombre pragmático en el buen sentido de la palabra (ese pragmatismo cuyo fin es el mejoramiento de la sociedad que del poder), sabe negociar, trabajar junto con sus opositores con el fin de beneficiar a su entidad gobernada (así lo hizo con Peña Nieto tomando en cuenta que las políticas públicas implementadas en el Estado de México, específicamente en el área conurbada, afecta al Distrito Federal y viceversa). Marcelo Ebrard mostró su profundo desacuerdo con el fallo del TEPJF en las elecciones, pero sabía que en su posición, lo más prudente no era  desconocer al «Presidente Electo» durante 6 años (reconocer su posición no implica de ninguna manera, reconocer su triunfo legal y legítimo). Tomó una decisión prudente donde los panistas primero critican y luego se arrastran ante el «Presidente Electo», o los obradoristas que lo desconocen a un grado en que no cabe ningún margen de negociación. Tal vez para grupos sociales como los del #YoSoy132, lo más prudente sea insistir en que las elecciones fueron fraudulentas. Pero muchas veces los políticos tienen más margen de maniobra usando el poder que les confiere su puesto para buscar mejoras, que el simple desconocimiento de una «figura pública» (entre comillas porque a Peña Nieto le queda grande ese nombre).

Espero de corazón que en el 2018 veamos a izquierdistas como a Marcelo Ebrard, a Mancera o De La Fuente. Creo que la izquierda se tiene que renovar,  y ahora más porque ya tienen «menos compromisos».