Hipocresía.

Nov 17, 2008

¿Que prefieres, que te digan pendejo en tu cara, o que te sonrían y digan a tus espaldas que eres un pendejo?

La hipocresía es una de las actitudes negativas del ser humano que mas detesto, porque a diferencia de todas las demás (maldad, agresividad, rencor, humillación, etc..) el afectado no tiene una capacidad de reacción inmediata (es decir, a menos que sea muy astuto, no lo percibe en el instante), y además por el grado de cobardía que esto implica. La hipocresía es uno de esos antivalores que al aparecer te humillan con mas fuerza puesto que esto significa un rompimiento repentino de parte de tu caja de creencias (creí que ella me amaba, creí que le caía bien, creí que era mi amigo). 

Mientras que los otros antivalores pueden surgir mediante un malentendido, un error, o una muestra de inestabilidad emocional, y que por lo tanto puede sanar; la hipocresía descarta ese malentendido per sé; puesto que  implica un mal concepto del hipócrita para con la otra persona, y al mismo tiempo implica que el afectado también cambie repentinamente el concepto que tenía del hipócrita. Es decir, un veneno suficiente para romper los lazos recíprocos entre dos personas, por lo cual una amistad puede dejar de tener sentido.

El mundo moderno a veces nos invita a ser hipócrita, y a veces pareciera que fuera parte de nuestra lucha por la supervivencia. La gente quiere saber ser compasiva y filantrópica de acuerdo a sus valores religiosos y morales, pero cuando se trata de negocios no pueden tener compasión, porque a veces esta «compasión» podría significar un descalabro (aunque hay unos descarados que no son compasivos ni cuando el serlo no los perjudica), y a veces es difícil huír de esta dualidad, dado que es mas fácil (y tal vez mas práctico) ser blanco en algunas situaciones y negro en otros, que ser siempre «blanco» o siempre «negro».

Hipocresías a nivel social como este último, en algunos casos son mas perdonables puesto que en muchos casos son difíciles de evitar, y en algunos el «hipócrita» no se da cuenta de ello, porque no se da tiempo de reflexionar. Pero cuando hablamos de una hipocresía a nivel personal, ya habla de una destrucción total de la integridad de la persona hipócrita y del lazo que la unia con otra.

Por eso yo prefiero a una persona que me insulte en la cara a una que hable mal de mí a mis espaldas; porque de esta forma puedo saber quien es, y si es necesario, puedo defenderme.