¿Qué es eso de Futuro 21?

Sep 3, 2019

Futuro 21 es una iniciativa creada en su mayoría por perredistas que aprovecharán el registro del ya desacreditado PRD para que, con este nuevo partido, logren ser la oposición a López Obrador.

¿Qué es eso de Futuro 21?

No es la primera vez que alguien quiere formar alguna suerte de oposición hacia la Cuarta Transformación. Hemos visto algunas iniciativas ciudadanas y hemos vistos a los partidos tradicionales tratar de fungir como tal sin siquiera entender qué fue lo que pasó. En general, ninguna de estas iniciativas ha logrado algo rescatable que pueda tener preocupado a un gobierno que sigue campante con su mayoría absoluta y sus altos niveles de aprobación.

Tan solo la prensa y algunas organizaciones o think tanks son las que han generado alguna incomodidad al gobierno actual, pero no más.

En este contexto surge Futuro 21, el cual será un nuevo partido que no tendrá que cumplir con los engorrosos requisitos para conformarse, ya que utilizará el registro hasta ahora tiene el PRD que desaparecerá para dar paso a esta iniciativa que, por cierto, está formado por muchos perredistas como Miguel Ángel Mancera, Jesús Ortega, Jesús Zambrano, Fernando Belaunzarán así otros políticos como Gabriel Quadri y el ex priísta José Narro.

Este partido pretende tener una postura entre centrista o socialdemócrata, aunque la vez pareciera pretender ser transversal en lo ideológico como para acaparar el mayor número posible de los indignados que se vayan acumulando con este gobierno (lo cual en sí me parece un acierto). Ortega y Zambrano son hombres de izquierda, mientras que Quadri es un liberal que de pronto llega a flirtear con iniciativas conservadoras como Vox en España.

Pero tal vez ese sea el único acierto, porque de ahí en más no vemos nada nuevo bajo el sol. Esto suena más bien a un rebranding del PRD que, producto de sus últimas decisiones (como ir junto con el PAN en varias elecciones incluyendo la presidencial), ha perdido su identidad. Pero Futuro 21 no nos muestra algo nuevo más allá del cambio de nombre y la incorporación de alguno que otro elemento.

Futuro 21 está conformado por elementos de la misma clase política que fue barrida en las elecciones pasadas. No se trata de una nueva cosa que ha surgido desligada de la clase política, sino de la reedición de aquella otra que fue desechada por el electorado. Muchos de ellos fueron derrotados en elecciones pasadas y, peor aún, muchos de ellos son personas imponentes (de esas que buscan brillar sobre los demás) de diversos colores y sabores que en algún momento podrán entrar en disputas o conflictos. Quadri, Belaunzarán, Jesús Zambrano o Rubén Aguilar son de esas personas que les gusta estar al frente del atril.

Peor aún es el nombre que han elegido, no solo porque adoptaron prácticamente el mismo nombre que el nuevo partido de los wikis ya había adoptado, que no es un nombre que se destaque por su originalidad, sino que al parecer le agregaron fecha de caducidad. El 21 claramente apela a las elecciones intermedias del 2021. Pero ¿qué va a pasar después? ¿Qué le van a ofrecer al electorado más allá de ese año? El nombre, que pareciera salir de una agencia publicitaria de medio pelo, es ya de por sí confuso y en realidad no dice nada.

Y para terminarla de amolar, el domingo, el día del Informe (primer o tercero) de López Obrador, organizaron una marcha a la cual invitaron a participar incluso a organizaciones reaccionarias como Chalecos Amarillos. Lo que iba a ser una «mega marcha» fue un rotundo fracaso ya que al parecer apenas lograron conglomerar a poco más de 1,000 personas.

Es casi hasta iluso esperar que la clase política pasada sea la que vaya a lograr conformar un movimiento opositor en el cual los ciudadanos que no simpaticen con AMLO encuentren un refugio. Me queda claro que para que surja una oposición que incomode al gobierno actual tendrán que surgir nuevos líderes que no hayan emanado de esa clase política que fue casi desterrada en las urnas.