Calificación: 4 de 5.
El Infierno es la 3era película de Luis Estrada donde critica (desde la izquierda) problemas actuales (o pasados), de el país. El primero fué La Ley de Herodes, donde la crítica iba enfocada al PRI autoritario; la segunda fué Un Mundo Maravilloso donde criticaba al gobierno panista y las políticas neoliberales. En esta tercera, la crítica va hacia la problemática que vive nuestro país actualmente con el narcotráfico, y donde Luis Estrada aprovecha la coyuntura de los festejos del Bicentenario para explicarnos como es que se vive el problema del narcotráfico en el país.
¿De que trata la película?. Damian Alcazar en el papel del «Benny» Benjamín García, cruza la frontera a los Estados Unidos, de donde 20 años más tarde es deportado y regresa a México. Pero se encuentra con un país muy diferente al que dejó. En su natal San Miguel, las cosas ya no son como antes, la violencia y el narcotráfico ha invadido el estilo de vida de sus habitantes y ha corrompido a la sociedad. Al llegar, «Benny» descubre que han matado a su hermano (el cual se involucró con el narcotráfico) y al intentar descubrir quien y como lo habían matado, poco a poco se va involucrando en las redes del narcotráfico que tienen amarrado al pueblo de San Miguel.
En la película podemos conocer a diferentes personajes muy peculiares que nos encargan de representar lo mejor posible la problemática del narcotráfico que se vive sobre todo en el norte del país. «Benny» se involucra con el narcotráfico gracias a el Cochiloco, un amigo de hace muchos años que ha terminado bien parado en el negocio del narcotráfico, a Don José, el capo y jefe de toda una red de narcotraficantes, a la cuñada con la cual Benny sostiene una relación y a su sobrino el diablito, un joven de 14 años que comienza a ser arrastrado por las tentaciones del narco.
La película tiene un alto dosis de humor, pero también es muy cruda. No por nada la RTC la clasificó con la letra «C». Tiene contenido sexual, violencia explícita, mutilaciones, asesinatos y todo lo necesario para tratar de representar lo que sucede en nuestro país. Los efectos especiales de la película son bastante aceptables (muy buenos diría yo tomando que es una película nacional) los cuales logran cumplir su cometido al mostrarnos la crueldad con la que el narcotráfico trabaja.
La película nos deja con una imagen muy agria de nuestro país, más cuando no hablamos de una película propositiva, sino más bien de una película muy crítica que se encarga sin piedad de desmenuzar (a veces de una forma exagerada) la realidad que estamos viviendo en muchos sectores de nuestro país. La película toca el tema de la corrupción, de la violencia, de los asesinatos, hasta de como a veces la religión y el gobierno está inmiscuído en los problemas del narcotráfico. También nos enseña como operan los narcotraficantes desde adentro. Uno se ríe al ver cuando Don José le dice a Benny los puntos que hay que tomar en cuenta si se quiere ingresar en este mundo: Honestidad, honradez y discresión. Pero vemos que en el narcotráfico el crimen no paga, y si capos como Don José pierden la vida de uno de sus hijos por el error o la negligencia de alguno de sus militantes, el no tendrá piedad en matarle a uno de sus hijos.
A diferencia de las otras dos películas, la critica no va tanto contra el gobierno (pocas veces se toca el tema de la lucha de Calderón contra el narcotráfico). Sino más bien contra el narcotráfico mismo, contra las autoridades y la misma sociedad que se corrompe por las tentaciones del narco. La película dura 149 minutos (más de dos horas), pero la extensión de la película vale la pena. En ningún momento se vuelve tediosa o aburrida.
El Infierno es una película altamente recomendable para aquellos que quieran conocer más a fondo lo que sucede con el narcotráfico en nuestro país, los invito a que la vean.