Siempre que Forbes anuncia su lista de los más ricos del mundo, en México se genera mucha polémica. Carlos Slim y Joaquín «El Chapo» Guzmán aparecen frecuentemente en estas listas. Pero ahora vamos a hablar sobre el primero, que ha generado tanta polémica, porque uno se pregunta, ¿como en un país jodido (como le llama Javier Aguirre) puede existir el personaje más rico del mundo?.
¿Carlos Slim es rico por sus propios méritos, o lo es gracias a los monopolios o a la corrupción que existe en el país?. Yo creo que de cierta forma todo tiene que ver. Carlos Slim es una persona muy inteligente para los negocios, tiene un gran olfato para detectar oportunidades de negocio, un olfato envidiable no solo para la persona común y corriente, sino para muchos millonarios que ya quisieran tener. Pero también es cierto que existe un lado oscuro. Carlos Salinas de Gortari le vendió un Teléfonos de México exageradamente devaluado, pero con toda la infraestructura necesaria para que la competencia no se atreviera a entrar.
Desde que Carlos Slim se hizo de Teléfonos de México, el servicio mejoró indudablemente. Ya no se tenían que hacer filas para pagar el teléfono ni se tenían que esperar 10 años para que se obtuviera la línea telefónica tan solicitada, como llegaba a ocurrir a veces (casi el mismo tiempo en que tardaban los alemanes orientales en solicitar sus autos Trabant en la Alemania comunista). Los precios de las líneas telefónicas bajaron y se hicieron accesibles para todo el mundo. Hasta aquí todo se escucha muy bien, pero la OCDE (a la cual México pertenece) recrimina que los precios de la telefonía todavía son demasiado caros en comparación a los otros países de la organización y hay un gran rezago en la banda ancha. También se recrimina que Telmex cobra más caro en su mismo país de origen que en los otros países que incursiona, dado que en esos otros países existe más competencia, lo cual obliga a bajar los precios.
Carlos Slim también es un filántropo y colabora con varias organizaciones como la fundación alas. También tiene un museo en honor a su difunta esposa, el Museo Soumaya, dentro de la Plaza Loreto, también propiedad del magnate mexicano, y donde tiene exposiciones temporales de artistas mexicanos y extranjeros, como el también libanes Gibran Kahlil Gibran. Además en dicho museo tiene obras importantes de pintores como Siqueiros, Tamayo, o el mismo Salvador Dalí.
Carlos Slim es poseedor de un gran emporio, tan grande que diariamente consumimos sus productos o servicios en alguna empresa que pertenece a él. Cuando compramos algún producto en Sears, hablamos por teléfono vía Telmex, compramos un cd en Mixup, tomamos un café en Sanborns, o hacemos un depósito bancario en Inbursa. También tiene otras empresas como Condumex y Nacobre, y no solo eso, también es accionista minoritario de Apple y New York Times.
Tal vez lo único que le falta a Carlos Slim es ser más reconocido dentro del Jet Set del mundo. Porque a pesar de estar siempre entre los tres más ricos a nivel mundial, no es tan popular dentro de las altas esferas. Dicen que por eso ha decidido comprar acciones de empresas como New York Times, para darse a notar y decir. -Yo soy Carlos Slim y estoy aquí.
Mi percepción de Carlos Slim es ambivalente. Por una parte admiro su capacidad de crear riqueza y tener un buen olfato en los negocios. Pero por otro lado también es cierto que ha aprovechado algunas deficiencias estructurales del país para hacerse de dinero. Porque no se explica de que otra forma un magnate pueda llegar a ser el mas rico del mundo en un país que no solo alcanza a figurar entre los que poseen mayor Producto Interno Bruto a nivel mundial, sino que tiene a la mitad de sus habitantes sumido en la pobreza.
Como se quiera ver, Carlos Slim es un personaje muy polémico, que tiene su nombre dentro de los anales de la historia de México, y de los magnates más poderosos del mundo.