Espero que esto no lo lean los directivos del Comité Olímpico Mexicano, porque luego se les va a ocurrir que nuestro fracaso deportivo es genético (es mas bien mental), pero aquí les enseño un artículo que se me hizo muy interesante, donde se confirma según un estudio porque los negros destacan tanto en el deporte.
Como media, los reclutas de raza negra presentan mayor masa muscular en las piernas y menos en el tronco, en comparación con los blancos de origen anglosajón y los hispanos. Así de simple es la conclusión de un estudio llevado a cabo por el US Army Research Institute of Environmental Medicine que se publicará a finales de este mes en el Congreso Americano de Medicina Deportiva.
En la investigación participaron 322 mujeres y 173 hombres, todos recién reclutados por el Ejército estadounidense. Lo curioso no es que los jóvenes de raza negra tengan en las piernas más masa muscular que los blancos —algo que ya era conocido— sino que poseen más grasa. En otras palabras, la potencia, pero también el peso total de sus miembros inferiores, es mayor.
Esta diferente distribución de masa entre las piernas y el tronco puede ser uno de los secretos aún no desvelados acerca de la inferioridad de la raza blanca en muchas especialidades deportivas que exigen rendimientos físicos muy intensos. Porque a nadie sorprende ya lo sucedido el pasado año en los Juegos Olímpicos de Sidney, cuando los ocho finalistas de los 100 metros lisos fueron atletas de raza negra.
Una situación muy habitual
Se trata de una situación que se viene repitiendo desde los Campeonatos del Mundo de Atletismo disputados en Roma, hace ya 15 años. En aquella ocasión, tres atletas blancos alcanzaron la final. Desde entonces, los velocistas de color han copado todas las plazas en las finales del hectómetro, por excelencia el test de velocidad del ser humano.
De forma constante, se vienen postulando teorías diversas en torno a la superioridad de los deportistas negros en esfuerzos de carácter explosivo, como es el caso del fútbol americano, baloncesto o atletismo. Hipótesis acerca de una supuesta selección natural, estudios sobre la composición muscular, teorías genéticas… desde hace años se barajan multitud de propuestas para intentar comprender desde el punto de vista de la Fisiología del Deporte un hecho que es incuestionable: los deportistas de raza negra son los más rápidos.
El estudio del Ejército americano revela también diferencias (esperables) entre los soldados de ambos sexos. De forma global, y sin distinción de razas, los hombres mostraron mayor cantidad de grasa en el tronco y menos en las piernas que las mujeres.
Una investigación ‘de moda’
Lo cierto es que la investigación de las diferencias anatómicas y fisiológicas entre atletas de distintas razas se ha puesto de moda. Hace dos años, científicos de la Universidad de Indiana (EEUU) publicaban un trabajo que profundizaba en la llamada arquitectura muscular de los deportistas de alto nivel.
Su propósito no era otro que determinar si las diferencias en la distribución y cantidad de la masa de músculo esquelético estaban condicionadas por la raza, y para ello investigaron a 44 jugadores universitarios de fútbol americano (31 blancos y 13 negros).
Sin embargo, no pudieron encontrar diferencias significativas a nivel muscular: los jugadores negros presentaron un promedio de 89,9 kilos de masa libre de grasa frente a una cifra de 89,1 en los blancos.
Fuente: El Mundo