Lo que debes saber sobre el Estado de México y el futuro del PRI

Mar 17, 2017

El PRI podría jugarse su futuro en las elecciones del Estado de México este 4 de junio. El problema para los tricolores, es que el PRI podría perderlas.

Lo que debes saber sobre el Estado de México y el futuro del PRI

Si fuera priísta yo estaría muy preocupado. Porque aunque en los consejos y reuniones del partido sienten que son fuertes y lo pueden todo, la realidad, este 4 de junio, podría caer como un balde de agua fría, muy fría. -Sí, más que los baldes del Ice Bucket Challenge-.

Empiezo diciendo que el Estado de México ha sido y es muy importante para el PRI. Esa entidad es casi como si se tratara de su centro de operaciones, porque tanto el voto duro que ahí ostenta como el presupuesto al que tiene acceso ahí, ha permitido que el partido se siga manteniendo como uno de los más importantes de México.

Por esa razón esta entidad no ha visto la alternancia, porque el PRI tiene un gran poder ahí y ha procurado mantenerlo a costa de lo que sea.

Pero este año, el PRI podría perder el Estado de México.

Y las consecuencias que podría tener esto para el PRI podrían ser desastrosas. Podría tratarse casi de su acabose. 

A corto plazo porque confirmaría lo que ya es casi un hecho, que perderán la presidencia en 2018. No tener disponibles todos los recursos -económicos y humanos- de los que siempre han echado mano será determinante en la elección del año que viene.

A mediano y a largo plazo porque sumar al descrédito que el partido tiene, el hecho de que perderán las regiones más pobladas y donde se concentra la mayor parte de los recursos económicos -Además del Estado de México seguramente perderán Jalisco, y quien sabe si vuelvan a recuperar Nuevo León-, podría quitarles tal cantidad de poder de tal forma que nunca recuperen la fuerza que hasta hace poco ostentaban.

No sin olvidar el envejecimiento del voto duro del PRI y de lo cual he hablado con insistencia

Pero entremos en materia. ¿Por qué el PRI puede perder el Estado de México? La encuesta que lanzó Reforma es muy ilustrativa. 

Según Reforma, el candidato del PRI, Alfredo del Mazo lleva un punto de ventaja, lo cual se considera un empate técnico. Esto es así, mientras que en 2011, Eruviel Ávila le ganaba por más de 40 puntos al perredista Alejandro Encinas. En 2011 no había nada más que PRI en el Estado de México, ahora la situación es diferente.  

Fuente: Grupo Reforma.

Mi pronóstico es que la elección terminará siendo de dos, entre Alfredo del Mazo y Delfina Gómez. Pienso que Josefina Vázquez Mota terminará -una vez más- desinflándose. Y si la elección es de dos, entonces la derrota para el PRI podría ser casi inminente. Es decir, el PRI necesita un escenario donde tanto Delfina y Josefina se mantengan competitivas hasta el final para que ellas dos se dividan el voto opositor como ocurre actualmente.

Y esto ocurre la mayoría de las veces, tomemos como referencia las elecciones presidenciales donde la contienda siempre termina siendo de dos, mientras que el tercero termina relegándose. En 2000, la contienda fue entre Vicente Fox y Francisco Labastida, relegando a Cuauhtémoc Cárdenas a un tercer lugar. En 2006 fue entre Felipe Calderón y Andrés Manuel López Obrador, relegando a Roberto Madrazo, y en 2012, la propia Josefina Vázquez Mota terminó desfondándose pare dejar la contienda entre Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador. 

Pero, ¿qué pasaría en ese escenario? Grupo Reforma se molestó en preguntar a la gente cómo votaría si la elección fuera entre dos y no entre tres. En todos los escenarios donde aparece Alfredo del Mazo, el PRI saldría derrotado de forma contundente:

Fuente: Grupo Reforma

Peor aún. En el propio Estado de México, el PRI tiene más negativos que cualquier otro partido, así como su candidato quien también tiene más negativos que Josefina Vázquez Mota y Delfina Gómez Álvarez.

El PRI va en primer lugar -empate técnico- según la encuesta de Reforma, pero todos los otros datos hacen pensar que tendrán una tarea muy difícil. El hartazgo hacia el partido tricolor ya permeó el estado que era intocable, el cual daban por sentado en todas las elecciones. El desgaste de la imagen del partido, aunado a la pérdida progresiva del voto duro debido al cambio generacional puede quitarle al partido tricolor el Estado de México. 

Y si eso pasa, el PRI podría caer y no recuperarse nunca más. Lecciones como las de Italia y Grecia -países también acostumbrados al patrimonialismo- donde los partidos hegemónicos prácticamente desaparecieron son muestra de que el PRI ni es invencible ni existirá para siempre. 

Para terminar, les invito a consultar todo el estudio de Reforma para que saquen sus propias conclusiones