A los mexicanos nadie nos defiende de Donald Trump

Jul 28, 2016

Todos hablan de Donald Trump y del desprecio que nos tiene, pero parece que Obama y los Clinton están más dispuestos a defendernos que nuestro propio gobierno.

Vuelve a estar en el centro de atención, no sólo por su discurso que despertó los impulsos más instintivos de un sector de la ciudadanía estadounidense, sino porque Donald Trump ya es el candidato oficial.

Y quienes deberían estar más preocupados somos nosotros los mexicanos. En todos los países hablan de Trump, algunos especulan que podría cambiar el orden mundial, que podría condenar a Estados Unidos a su perdición y que hasta podría aliarse con su peor enemigo, los rusos, quienes vía Wikileaks (esa plataforma que pensaste era bien democrática) filtraron correos de la campaña demócrata que benefició, sí, a Trump, quienes los exhortó a publicar más correos de la que llama «Crooked Hillary». Sí, en el país de la Guerra Fría, del macartismo y el MK-Ultra.

A los mexicanos nadie nos defiende de Donald Trump

vice.com

Pero el país que debe de estar preocupado, más que todos los demás, es México, porque Donald Trump básicamente nos declaró la guerra.

Una guerra no en el sentido militar, pero sí en el sentido político y comercial. Nosotros somos los culpables de todos los males de Estados Unidos, clama el magnate; entonces nosotros debemos de pagar, debemos de pagar nuestro muro.

Y cuando esto pasa, nuestro gobierno no puede quedarse con los brazos cruzados.

https://www.youtube.com/watch?v=ORw0WClA_D0

El gobierno no puede hablar de respeto y negociaciones ante una figura que insulta a nuestro país, le declara la guerra, y no está dispuesto a negociar. La diplomacia tiene límites, Donald Trump los ha sobrepasado, y en México parecen no haberse dado cuenta. Agachan la cabeza y se esconden, mientras el temor dentro de los ciudadanos mexicanos se acrecenta.

Nuestro país necesita que su gobierno lo defienda, aunque en la práctica no pueda hacer mucho (por la inmensa disparidad entre los dos países). Necesita sentirse apoyado moralmente y no traicionado por quienes los gobiernan.

Pocos han levantado la mano. Quien posiblemente sea candidato independiente, Jorge Castañeda, ha llevado a cabo una cruzada en contra de Trump, Vicente Fox (aunque no sé que tan buena sea su ayuda), Felipe Calderón se ha manifestado, alguno que otro partido político lo ha mencionado para ganar votos, y en alguna ocasión el Senado se manifestó de forma un tanto displicente (pegando calcas en su sede). Pero la reacción del gobierno es timorata, no hay ni siquiera orgullo patriótico.

El Senado contra Trump

Senado de la República

Y aunque la defensa no alcance ni de lejos para «poner en su lugar a los gringos», la defensa moral es muy importante para una nación que aspira a tener más cohesión y espíritu. Posiblemente se diga que «no se gane tanto» si los gobernantes critican de frente a Trump, pero sí se pierde mucho si no se hace. Si en la historia queda escrito que un gobierno agachó la cabeza ante los desplantes de un fascista que llegó a provocar hasta una crisis económica en nuestro país (lo cual es plausible), nuestro inconsciente colectivo, dentro del cual, todavía se recuerdan muy bien los agravios de hace más de un siglo, recibirá una herida más. una razón más para no sentirse orgulloso de México. México perderá respeto (tanto dentro como fuera), y por lo tanto, poder blando (soft power) si la postura de nuestro gobierno es displicente.

Es triste ver como Obama, Bill y Hillary Clinton nos defienden más que nosotros mismos. Los demócratas hablan más sobre los mexicanos en Estados Unidos que lo que lo hacemos nosotros. Nuestra postura es agachona, propia de un país con una autoestima baja que saca cada rato a flote sus miedos históricos. Mientras Michelle Obama da un discurso emblemático, en México todos callan:

https://www.youtube.com/watch?v=XN389JE2lVA

Los opinólogos y las plumas sí hablan más e insisten, pero también quienes escribimos no tenemos nada que perder. La sociedad permanece inerme, hasta ahora no se ha llevado a cabo manifestación multitudinaria alguna para repudiar a Trump. Como es costumbre, los ciudadanos nos quejamos en la sobremesa y subimos muchos memes a las redes sociales, pero pareciera respirarse un ambiente de resignación cuyo único antídoto y posibilidad es que Hillary gane las elecciones.

Sigo pensando que Hillary ganará, que al final el fanatismo, el odio y la ignorancia no vencerán, y porque además, el escenario apocalíptico que está construyendo Donald Trump es muy artificial. Estados Unidos no está tan mal como Trump lo describe, de hecho la está pasando menos mal que otras potencias económicas y la tasa de empleo en Estados Unidos se ha reducido.

Pero que Trump sea Presidente de los Estados Unidos es una posibilidad, lo suficientemente seria como para que nosotros los mexicanos ya tomemos cartas en el asunto y defendamos a nuestro país frente a los ataques de un fascista irracional como lo es Donald Trump.