El fraude NO electoral

Jul 4, 2012

El fraude NO electoralLópez Obrador está pidiendo hacer un reconteo total de las boletas, ciertamente hay muchas irregularidades, pero creo que estas no estuvieron dentro de las casillas (más no sabemos que tanto estuvieron en el PREP, pero eso se soluciona ya con el conteo manual), más bien estuvieron fuera de ellas (solo físicamente) aunque naturalmente si incidieron en el proceso electoral porque estas irregularidades (palabra que ya parece eufemismo) incidieron naturalmente en el voto. Dentro de las casillas la elección hasta eso estuvo blindada, no solo por el IFE, sino porque los ciudadanos se apresuraron a observar el proceso electoral. La organización civil Conciencia Cívica A.C. que fungiera como observadora electoral, detectó compra, acarreo y coacción del voto en 21% de las casillas que vigilaron, claro que esto no anula el buen trabajo de los ciudadanos que participaron en la elección porque dichos atentados se llevaron a cabo fuera de las casillas.

Si nos vamos a los números que arrojará el IFE podemos pensar que dentro de las casillas Peña Nieto ganó legítimamente, porque los votos (al menos la mayoría) fueron los que los ciudadanos hicieron. Posiblemente con el recuento, la distancia entre Peña Nieto y Obrador se estreche un poco, porque no es falso que dentro del PREP existan irregularidades a favor del PRI. El problema entonces está en la coacción y compra de votos que ha sido la más grande en la historia reciente del país, el problema es que ni un recuento o escrutinio puede medir eso, no se puede determinar si la emisión de tarjetas para acarreados del Soriana es directamente proporcional al número de votos comprados, igual con la coacción, el acarreo y los mapaches.

Si se quiere pensar en un fraude tenemos que remitirnos a la compra de votos, a la compra de tarjetas Monex y Soriana con recursos públicos, al rebase insultante de topes de campaña, e incluso a la campaña de Televisa financiada con nuestros impuestos para construir la imagen de Peña Nieto. Pero como decía Sergio Aguayo, la izquierda se vio torpe para denunciar muchos de estos hechos y casi hasta ahora están tratando de armar todo, cuando todos sabíamos que estos atropellos se habían realizado desde antes. Y más sabiendo que el presidente del TEJPF ya habla de no aceptar impugnaciones y demandas, creo que sea como sea, la victoria de Peña Nieto será irreversible, porque una elección solo se puede anular o corregir en el conteo de votos y ahí no se encuentran las mayores irregularidades.

Lo que pasó el domingo es vergonzoso, y es una muestra clara de que México no es un país democrático, el IFE se ha quedado corto y ha mostrado signos de un deterioro cada vez mayor, cierto que la elección tiene muchos candados, pero cierto es que los observadores y quienes se han involucrado lograron que no se pueda pensar en un fraude dentro de las urnas; el IFE fue displicente con las denuncias interpuestas por el PRD y el PAN (quienes ahora dicen que las elecciones fueron limpias, a pesar de mostrar una postura contraria en las últimas semanas) contra el PRI en el asunto de la compra de votos.

Peor, cuando vemos el grueso de los votantes de Peña Nieto, la gran mayoría no fueron votos razonados, entre los acarreados, entre quienes vendieron su voto (y por ende vendieron su ciudadanía por una despensa), y entre las mujeres enajenadas mediáticamente por Televisa y las telenovelas (Peña bombón, te quiero en mi colchón); entonces llegamos a la conclusión de que es un atropello a la democracia, a pesar de que se «respeten» las instituciones que la procuran o dicen procurarla, porque  fuera de los límites hacen lo que sea, simplemente, con tal de llegar al poder.

Por cierto, ayer tuve la oportunidad de asistir a la conferencia de académicos #YoSoy132 sobre las elecciones, organizado por este movimiento, y donde unos académicos se unieron a él como una forma de apoyar. Me quedé con una muy grata impresión. Todos hablan de una imposición, pero yo no percibo radicalismo alguno (como algunos aseveran) y tampoco percibo de ninguna manera que este sea un movimiento cooptado por López Obrador, de hecho, dentro de todo el análisis que hicieron, criticaron a la izquierda, y dijeron que la izquierda social «era» a pesar de, la izquierda partidista. Naturalmente hay muchísima indignación, y están descontentos por como se llevó a cabo todo el proceso electoral (en todos sus pasos).