Hartazgo social pre-panamericano

Oct 3, 2011

Desde el mes de octubre del año pasado, el Copag planeó una estrategia de socialización de los Juegos Panamericanos en la ciudad cuya finalidad era, básicamente, generar identidad y sentido de pertenencia de la ciudadanía hacia este evento. Las llamadas giras de socialización se enfocaron en las escuelas públicas y privadas, así como en las universidades para sembrar en los niños y jóvenes de la ciudad, el espíritu panamericano y de ahí, captar voluntarios para el desarrollo de la justa panamericana.

El plan de socialización de los Juegos, implicaba la acción de un equipo de voluntarios que estaría en las colonias y entregaría un video promocional e informativo de los Juegos a las asociaciones vecinales. La meta de esta estrategia es el involucramiento de la sociedad con los Panamericanos despertando la “conciencia y el entendimiento” de lo que representan para la ciudad. Si existe entonces una estrategia de socialización, ¿por qué los ciudadanos hemos sufrido tanto los Panamericanos antes de que ocurran?

Entre las posibles respuestas, hay una que se ha posicionado en la mente de los ciudadanos. Los Juegos Panamericanos han estado rodeados por el escándalo: desde su organización, planeación y presupuestos (comenzando por el tema de las fallidas Villas Panamericanas en el Parque Morelos hasta la falta de transparencia del Comité Organizador). A la par de los excesos y escándalos se hace visible lo evidente, los Juegos han dividido a nuestra clase política, en lugar de unirla de cara a una buena planeación y ejecución de esta justa deportiva.

No contentos con el escándalo y el enfrentamiento, las razones del hartazgo ciudadano panamericano también transitan por una falta de información sobre los procesos cotidianos a los que nos tendremos que enfrentar los 15 días que dura la justa deportiva; específicamente los que tienen que ver con la movilidad. Tráfico, carriles panamericanos, rutas alternas y qué hacer durante esos días; obtienen respuestas oficiales que sólo se basan en la justificación y no, en la información precisa. ¿Carriles panamericanos?, eran un requisito de la Copag. ¿Vías o rutas alternas para evadir el tráfico vehicular?, consulte mapas por Internet o vaya planeando sus propias soluciones.

No es posible negar que la estrategia de socialización, en términos de identidad y pertenencia, ha funcionado bien, sobre todo en las escuelas de la ciudad. No se puede decir lo mismo, con respecto a la socialización del día a día o de la vivencia de la ciudad en el cotidiano. La respuesta de las autoridades no se puede limitar al Internet o a los requisitos que tenían que cumplir. No ha habido simulacros sociales y viales porque las posibles contingencias siguen planeándose desde el escritorio y no se trasladan a la vivencia del día a día.

El hartazgo ciudadano panamericano, es un problema que ha sido detonado por las autoridades mismas. La socialización no es sólo un tema de difusión o publicidad, es también un tema de vivencia y de experiencia cotidiana y hasta el momento, la experiencia ciudadana en torno a los juegos se limita al conocimiento del escándalo y los excesos. El hartazgo social pre-panamericano es una realidad que tiende a ser post-panamericana, luego de la fiesta y en medio de procesos electorales, todo indica que los panamericanos y sus excesos, seguirán dando de qué hablar.