La mentalidad alemana

Jun 13, 2010

Alemania ha sido un país muy golpeado por la historia. Alemania más que ningun otro país podría justificar varios resentimientos que llegaron a raíz del Tratado de Versalles y de la caída del Tercer Reich en la Segunda Guerra Mundial. Los alemanes perdieron territorio en esas dos guerras mundiales e incluso fueron invadidos por Estados Unidos y la Unión Soviética, lo que hizo que al final se tuviera que construír un vergonzoso Muro de Berín que cayó hasta casi entrada la década de los 90’s. Pero a pesar de su historia y de sus heridas, Alemania es un pueblo que no se rinde, que siempre dá lo máximo de sí, y que no se deja llevar por sus «traumas del pasado».

Ahora justo en el mundial, al tiempo que escribo este artículo, Alemania le ganaba 4-0 a Australia en la fase de grupos. Para muchos es un marcador normal, pero para mí habla mucho de esa mentalidad ganadora que caracteriza al pueblo alemán. Hasta el día de hoy, las otras potencias como Inglaterra, Francia y Argentina, han jugado a medio gas conformándose con empates (en los dos primeros casos) y con un triunfo en el caso de Argentina donde si bien Messi lució y se hartó de fallar, se salvaron del empate frente a Nigeria. Pero los Alemanes se decidieron a jugar con esa garra y frialdad que les caracteriza, no solo como equipo de futbol, sino como pueblo, y sacaron una goleada de 4-0 frente a una Australia que ni las manos se atrevió a meter.

Jugadores como Muller, Podolski, Cacau y Klose demostraron su capacidad y tenacidad a la hora de marcar los goles. De hecho Miroslav Klose se coloca a solo 4 goles de igualar a Ronaldo como el jugador con más anotaciones en todos los mundiales, y curiosamente Klose nunca ha tenido los reflectores encima otros jugadores que vienen a este mundial, como Cristiano Ronaldo, Kaka, Iniesta, Rooney y otras estrellas que nunca se lograrán acercar al número de goles que el jugador teutón ha anotado. Y lo mismo pasa con la selección alemana, siempre se dice que ya esta vieja, que no tiene jugadores de peso, o en el caso de este mundial, que tiene varias estrellas lesionadas. Siempre hay una razón para dejar a Alemania fuera de los equipos favoritos para llevarse el título. Pero a diferencia de otros países que sí son nombrados como favoritos (sobre todo el caso de Argentina), han llegado al menos a cuartos de final desde México 86. De hecho en los últimos dos mundiales llegaron a ser finalistas (en Japón y Corea 2002), y semifinalistas (en Alemania 2006), además de haber quedado como finalistas de la última Eurocopa celebrada hace dos años donde sucumbieron con España.

¿Que hace que los alemanes, si, esos alemanes a quienes no muchos consideran, siempre lleguen a los primeros lugares de las justas mundialistas?: Su mentalidad. Los alemanes no tendran los talentos futbolísticos que tienen otros equipos, pero siempre, desde el primer partido salen a morirse en la cancha como si estuvieran disputando una final. Así lo hicieron esta vez contra Australia, y los terminaron humillando. Y es que esa actitud que caracteriza a alemania es el equivalente a tener en el campo a un jugador nº 12, que en este caso no es el aficionado, más bien es su actitud.

Como pueblo, podemos hablar igual de Alemania, parece no tener el peso que tiene Estados Unidos o Japón, pero siempre está ahí destacando, haciendo ruido, mostrándose como guerreros infranqueables ante todos los sucesos que ocurren en el globo terraqueo. Lo son tanto que, más que ningún otro país, han logrado cerrar esas fuertes heridas de muerte que recibieron en la guerra mundiales, a diferencia de otros países como México que nunca ha logrado superar sus problemas del pasado, a pesar de ser heridas mínimas si se comparara con lo que ha sufrido Alemania en la historia mundial. Incluso han superado sus propios prejuicios racistas y gente tanto negra como judía se ha logrado integrar con éxito a la sociedad alemania, y los que los repudian (los skinheads y neonazis) son una mínima minoría.

Ojalá y los mexicanos aprendiéramos un poco más de la actitud alemana y jugaramos nuestro rol de mexicanos como si de finales se tratase, no solo en el futbol, sino en nuestro trabajo, en la política, en la vida diaria. Apuesto a que si tomáramos aunque fuera un poco de esa exitosa idiosincrasia alemana nuestro país sería algo mejor. No por nada las empresas alemanas que laboran en México, son empresas que saben respetar el marco legal, y empresas que les dan un muy buen trato a sus empleados, ellos mismos lo dicen. Ojalá tomemos un poco de conciencia y aprendamos del caso alemán. Seríamos un pueblo mucho más unido, más justo, y sobre todo, más ganador.