El Mito y el Grito de la Independencia

Sep 16, 2009

A Felipe Calderón y a todos sus antecesores se les olvidó gritar «Viva Fernando VII» en todos los 15 de Septiembre para conmemorar el aniversario de la Independencia de México.

La historia la escriben los ganadores, y tanto en México, como en casi todos los países del mundo, la historia se cuenta y se enseña de una forma heróica y mitológica, para despertar ese nacionalismo que a veces se tambalea cuando las cosas no van muy bien en sus respectivos países. Al mexicano común, al verse desesperado por la corrupción y pobreza que hay en su país, lo exhortan a recordar a los heroes de la patria como Hidalgo, Juárez, Morelos, Cárdenas, y los famosos e inexistentes niños heroes.

En México, la historia de la independencia está llena de mitos y exageraciones que si las tomáramos en cuenta, no habría por qué festejar el grito de la Independencia cada 15 de Septiembre. Pero la historia oficial y las circunstancias post-independentistas así lo quisieron, y a fín de cuentas, los que ganaron, lograron escribirla como se les vino en gana.

Primero. Cuando Hidalgo dió el grito, si bien su lucha se tornó en la guerra de la independencia, no la buscaba realmente, tan es así que gritó: ¡¡Viva Fernando VII!!. La guerra no vino de abajo, sino que los criollos (hijos de españoles nacidos en México), querían los mismos derechos que los españoles.

La independencia se dá en el 27 de Septiembre de 1821, producto de los combates lidereados en gran parte por Guerrero e Iturbide. El problema fué que a la historia oficial no le convenía que Iturbide se quedara con el crédito de la independencia porque era conservador (que fueron a fin de cuentas los perdedores en la batalla contra los liberales), entonces la consumación, si bien se le reconoce a Iturbide, se le deja en segundo término.

Y hasta aquí todavía no logramos desmitificar totalmente el mito del grito de Independencia. Muchos se preguntan por qué el grito se acostumbra dar en la noche del 15 de Septiembre y no el 16, como debería de ser. Resulta que esa tradición de dar el grito todos los años, comenzó con Porfirio Díaz, y el mandatario había nacido el 15 de Septiembre de 1830. Entonces había que festejar la pachanga de alguna forma, y el decidió que el grito se diera en la noche de ese día, si, por su cumpleaños.

Muchos mexicanos que van a dar el grito, (en su mayoría en plan patrioti-parrandero-peda) no conocen lo que hay detrás de él. Porque la historia oficial nos ha vendido el grito como el ácto simbólico, cuando en realidad no era un grito de independencia. Más bien era el grito por los derechos de cierto sector social, que casualmente se transformó en el grito de la independencia nada más. Pero la fecha de la independencia se deberia haber festejado el 27 de Septiembre de 1821; lo malo es que como el grito no sería de noche, entonces ya no habría pretextos para salir de parranda con los amigos.