Esto solo pasa allá en Afganixtlán y en Irakácuaro.

Feb 21, 2009

«Pedro estudia en la secundaria, es una persona que no destaca precisamente por su corpulencia ni su fuerza. De hecho, es regordete, impopular y es es visto como el nerd de la clase. Su impopularidad ha hecho que los malosos del salón se aprovechen de él y le den su «receta» diariamente a la hora de la salida. Y como Pedro ya no soportaba ser víctima del «Bullying», entonces decidió llegar a una tregua; darles diariamente el dinero que les dán sus papás para que desayune en la escuela.

Después de eso, Pedro dejó de recibir las golpizas que de antaño recibía, y todos los días iba tranquilo a su escuela, tranquilidad que compraba con los 20 pesos que les daban sus padres. Pero de pronto se empezó a dar cuenta que estaba mal nutrido y esto se vió reflejado en la boleta de calificaciones del colegio. Ya no eran nueves y dieces, eran 5 y 6; y lo que ocurrió fué que las golpizas de los estudiantes se convirtieron en los castigos de los padres.

Pedro se dió cuenta que algo tenía que hacer, y en su mente declaró que iba a a declararle la guerra a los maleantes. Llegó al salón de clases vestido con un atuendo rebelde, esperó a que pasara uno de sus enemigos para decirle «chinga tu madre» y darle un puñetazo, ¿que pasó?, el pobre acabó en el hospital.»

El gobierno nos dice que se está avanzando en la lucha con el narcotráfico porque los carteles de la droga parece que están molestos, al igual que los maleantes que molestaban a Pedro se molestaron cuando este  los insultó. Pero lamentablemente creo que en esta guerra, México es el niño regordete y debilucho. Es cierto que se ha decidido hacer algo, pero al igual que Pedro, la estrategia salió mal. Aunque Pedro era un nerd con un cociente intelectual mas alto que los demás, parece que no usó su inteligencia, y en lugar de diseñar un plan estratégico, donde tal vez ni siquiera fuera necesario utilizar en extremo la violencia, se dejó llevar por sus emociones, se disfrazó de rebelde (así como lo hizo el presidente al vestirse de soldado) y decidió declarar la guerra sin mayores preámbulos. Pedro tenía a sus camaradas nerds que pudieron haber inventado armas de tomate en el laboratorio (así como el gobierno tiene las fuerzas de inteligencia como el Cisen), pero decidió hacerles frente y el remedio terminó siendo peor que el problema.

Sería injusto culpar a Felipe Calderón de la situación que se vive, porque mas tienen la culpa los que no hicieron nada (Fox por ejemplo) y dejaron crecer la violencia en el país. Pero también es realidad que por la vía de las armas, nuestras fuerzas no están pudiendo con los carteles y que una estrategia inteligente, sin atreverme a decir que se hubiera ganado la guerra, si hubiera sido efectiva. Y creo que aquí el presidente cometió un error estratégico, que ya mucha gente había señalado cuando comenzó su mandato.

Muchos personajes importantes intelectualmente en el país (como Enrique Krauze por ejemplo), han salido a la defensa para decir que nuestro país no es un estado fallido. Yo en mi parte creo, que si no lo somos ya, estamos cerca de serlo. Es cierto, tenemos un país «medianamente» democrático, unas instituciones que «medianamente» funcionan. Pero tenemos un problema de seguridad muy grave, que afecta a nuestro país en cuestión de violencia, y afecta a nuestro vecino del norte en cuestión de consumo (y a cuyo gobierno saliente, jamás le interesó ayudar).

Esto no es algo que pase «allá». Es la realidad de nuestro país, un país que al igual que países como Irak o Afghanistan, sufren muertes por los grupos disidentes que matan en pro de su beneficio.

El problema que se vive en nuestro país es muy fuerte, y este pone en riesgo lo que se ha construído con esfuerzo, dolor y sufrimiento por muchas décadas, que si no es perfecto, al menos mantiene un orden que hace que el país no caiga en una anarquía donde ya no se sabe quien gobierna. Creo que el gobierno debe ser mas inteligente, y creo que debe de dejar al lado los intereses propagandísticos (que son una arma de doble filo), si quiere que el país salga victorioso en esta batalla.

Si bien estoy en contra de la pena de muerte, creo que al narco se le debe de ver como un enemigo de batalla, y no como un inadaptado civil (como los secuestradores). La lucha contra el narco es una guerra, y merece un trato especial.

Para los que crean que «no pasa nada», les dejo este video, donde se muestra una situación que ya es cotidiana en el país.