Aparece el verdadero Obama.

Ene 18, 2009

Es cierto que George W. Bush ha sido un pésimo presidente (el peor de todos), pero existe gente que se confunde al creer que el es la raíz de todos los males. Si lo comparamos con Chávez, Bush en realidad solo es un títere de ciertas élites que se lavan las manos ante las nefastas políticas que han perjudicado tanto al mundo; pero a la vez pertenece a ellas, lo que ocasionó que los «poderosos» tuvieran un camino despejado para hacer lo que quisieran (y tal vez el único obstáculo fué la estupidez del presidente).

Contrario a los que muchos piensan, el cambio llamado «Barack Obama», no significa el fin de esas élites que presionan para que el gobierno cumpla sus caprichos. Mas bien podríamos decir que Barack Obama simplemente va a ser menos condescendiente con ellas que su predecesor, pero de ninguna manera la influencia de estas élites en el gobierno y en la geopolítica mundial va a terminar. Es cuestion de ver un poco de historia, donde si es cierto que las mayores agravios hechos a otros países han sido bajo gobiernos republicanos, pero tampoco es como que con los demócratas, Estados Unidos haya sido un país que haya hecho a un lado sus intereses para promover la paz mundial.

Sería demasiado estúpido pensar que no existirá algún tipo de cambio. La presidencia de George W. Bush fué tan mala en todos los aspectos, que superar lo que hizo es como quitarle un dulce a un niño. Además, por el bien de la nación, Obama tendrá que hacer un gobierno significativamente diferente al del oriundo de Texas, debido a que la supremacía estadounidense está en riesgo porque cargan con una crisis económica a cuestas y una baja reputación ante el mundo. Ante el crecimiento de China y otras potencias, Estados Unidos no se puede dar el lujo de tirar cuatro años mas a la basura.

Obama no podrá desprenderse de los hilos que manejan el poder y tendrá que aprender a negociar con ellos. Deberá aprender a negociar para mejorar el sistema de salud pública, para traer de regreso a los soldados a Irak, y para cumplir sus promesas de campaña en general. A unos días de su presidencia hemos visto cuales son los límites de Obama: Ya critica a Hugo Chávez (lo cual será beneficioso para el presidente bolivariano),y con el cual fué condescendiente en su campaña, y además, ya condiciona la derogación de restricciones a Cuba supeditándolas a un crecimiento de las libertades en la isla. Lo cual era de esperarse.

Yo creo en lo personal que Obama será un buen presidente que podrá regresar la esperanza que se perdió en la administración Bush, y creo que la posición de Estados Unidos frente al mundo será bastante mejor. Pero tampoco será el mago que muchos creyeron que iba a ser. El mismo acaba de comentar que los momentos que se vienen no son buenos, y que necesitará el apoyo de los ciudadanos para salir adelante.

En dos días aparecerá el verdadero Barack Obama, las campanas de la libertad económica seguirán sonando; pero probablemente estará dispuesto a controlar sus excesos.